Sobre Papcun
Martín Papcún comenzó a esculpir gruesos bloques de cuerno de búfalo de agua para convertirlos en gafas en 2009 y trabajó durante 8 años para WERKSTATT:MÜNCHEN como orfebre durante sus estudios en la prestigiosa Akademie Der Bildenden Künste de Múnich. Su vida hasta ahora le ha llevado a interesarse profundamente por Japón, y la práctica de zazen. Hace más de cinco años, lo dejó todo y se fue a hacer monje al monasterio zen de Antaiji. Meditó en medio de las montañas, desde el amanecer hasta el anochecer, con dolor, fiebre, desesperanza y fe. Se fundió con la naturaleza, se convirtió en la naturaleza. No era externo ni interno, todo se volvió uno, el «yo» desapareció. Fue un giro radical en su vida. Su percepción del mundo, de la vida y de la obra de arte se cortó por lo sano, la forma se convirtió en contenido y el contenido en forma. Después de este satori, no hubo necesidad de vivir en un monasterio, así que regresó a Europa llevando consigo la estética japonesa y un fuerte significado de la pared del monasterio: «¡Tu templo es donde estás ahora mismo!» La vida de Papcun sigue guiándose por este principio.
En 2019 regresó a Japón, a la ciudad de Sabae, que es el corazón de la producción de gafas. Allí aprendió de su maestro las técnicas originales de fabricación de gafas con cuerno de búfalo de agua que se compartían en su familia de generación en generación. Tras regresar a Praga, empezó a trabajar intensamente en nuevas piezas.
La estética de su trabajo va a la esencia, la forma pura, y una ejecución precisa en cada detalle. Las bisagras que ha diseñado se inspiran en las enormes bisagras de las esclusas de los canales de Ámsterdam. Son de acero inoxidable hipoalergénico, fabricadas con la máxima precisión japonesa. Las fundas, que cose a mano con cuero de curtido vegetal tradicional de los Alpes, adquieren una pátina única que refleja nuestra vida cotidiana. Para la fabricación de las monturas, sólo utiliza cuerno de búfalo de agua de la mejor calidad, que selecciona cuidadosamente entre sus proveedores, a los que ha visitado personalmente. Los bloques macizos de cuerno se tallan en gafas meticulosas. Se trata de un material natural hipoalergénico que es precisamente lujoso por sus propiedades únicas que nunca han sido superadas.
Las gafas son diseñadas y fabricadas íntegramente por el propio Papcun, porque el propio proceso de creación forma parte de su meditación. Las monturas de Papcun se basan siempre en dibujos hechos a mano, donde la línea refleja las emociones actuales del autor. En el posterior proceso de desarrollo, las gafas se perfeccionan, cuando la forma escultórica transforma la materia en objeto, en arte. Se alcanza entonces una forma ideal cuando se trata de gafas a medida, creadas en sinergia con el usuario. El tratamiento de la forma y la superficie se basan siempre en la naturaleza del material. Un corte transversal del cuerno, como un árbol, refleja el paso del tiempo en sus anillos anuales. Como un diario en el tiempo, deja marcas en la materia. El carácter de cada espectáculo individual es un registro de la época en que fueron creados, y por ello cada fotograma está fechado en el día en que se completaron, como una prueba de artista. Cada momento de la producción se imprime en el carácter final, que tiene una declaración emocional muy fuerte para Papcun. Por eso cada par de sus gafas es tan único. Es el camino hacia su esencia.